El lujo, el confort y el diseño son rasgos fundamentales de las zonas más exclusivas del planeta. Si se aúnan las tres características, en el imaginario colectivo resonarán los nombres de las ciudades más ricas del mundo. Una de ellas es Miami, un auténtico mito de ciudad costera en el mundo. El gran poder adquisitivo que existente en esta zona y el buen clima de esta ciudad del sureste de Florida, en la Costa Este de Estados Unidos, hacen que las construcciones sean vanguardistas y exhiban todo su potencial también de cara al exterior. Por eso la piedra natural en Miami está en auge.
La piedra natural Miami se está convirtiendo en el material fundamental de la gran mayoría de fachadas de viviendas en esta ciudad. Un hecho que combina buen gusto, materiales de calidad y un sinfín de posibilidades.
La piedra natural se abre al exterior
Por increíble que nos pueda parecer, los materiales más lujosos, aparte de estar dentro de las casas, salen a la luz desafiando el posible deterioro por estar expuestos a la meteorología, polución y otros factores que puedan erosionarlos. La otra cara de la moneda es que en su mayoría son materiales muy resistentes y de una limpieza y mantenimiento relativamente sencillos.
En estas villas de lujo, muchas de ellas en grandiosos residenciales, no es de extrañar encontrarse con piscinas de diseño. La piedra natural ha relegado al ya en desuso gresite y se pueden encontrar piscinas de distintos tipos de mármol blanco y diversos elementos en porcelana. Las isletas, dentro de la propia piscina, o las cascadas, de un diseño más natural o visiblemente artificiales, son otras de las posibilidades que ofrecen las piedras naturales.
Pero las piscinas no son el único elemento exterior susceptible de ser realizado en piedra natural. Para dotar de un estilo más sofisticado al jardín existen diferentes elementos que pueden ser utilizados. Es el caso de los paseos, zonas adoquinadas entre la cuidada vegetación que marcan el camino hacia los espacios habitables del hogar. Otro ejemplo son los parterres, que aportan diseño a zonas en las que otro de los protagonistas es la vegetación. Los patios y sus escaleras suponen una oportunidad para dotar de materiales de primera calidad a la imagen exterior de la casa. Sea como sea, la piedra natural constituye un elemento que reconcilia a la naturaleza con la naturaleza presente en la construcción. El uso de mármol blanco, de mármol calacatta o de piedra de Caen en estos tiempos supone una vuelta al origen pero desde el lujo y la estética.
Piedra natural en establecimientos comerciales
Si creen que las posibilidades y la presencia de la piedra natural acaba al abandonar el entorno familiar o privado se equivocan. Lo que supone un elemento distintivo en el ámbito privado, lo es más aún en espacios públicos. Este es el caso de los negocios, que cada vez más están optando por llevar a sus fachadas un material de calidad. Fachadas que los distinga estéticamente frente a una competencia menos centrada en la imagen y el glamour.
La piedra natural se convierte así en la cara visible de un negocio, trasladando al consumidor que lo que va a encontrar dentro es calidad y un ambiente selecto y agradable. Con esto, observamos locales de restauración y de ocio que han optado porque su imagen principal en el exterior la representen este tipo de rocas.
Dependiendo del gusto y de las sensaciones que cada local pretenda transmitir a su exterior, las posibilidades resultan infinitas y más aún tratándose de un área rica. Ya que el presupuesto no suele suponer un problema y se destina gran parte del capital de una inversión a proyectar una imagen moderna y de vanguardia.
Gran auge de los proyectos en piedra natural
El auge de los proyectos de piedra natural hechos a medida es innegable. En Stone Cross somos expertos en el sector con más de 20 años de experiencia trabajando con estos materiales exclusivos con acabados innovadores. La arquitectura y el diseño experimentan en Miami como laboratorio de futuras tendencias mundiales. Un diseño cada vez más atrevido y sorprendente requiere de materiales que se amolden a las necesidades de cualquier disposición.
Si unas piedras naturales son características por su dureza y resistencia, otras lo son por su capacidad de modelaje pero también de erosión por su alta porosidad. Entre estos dos tipos se sitúan las conocidas como piedras naturales flexibles. Entre sus características están que son más ligeras y fáciles de instalar. Resulta ideal para la arquitectura moderna por la adecuación a grandes espacios o revestimientos curvados, estructuras que no pueden ser recubiertas por cualquier tipo de piedras al no amoldarse estas a la curvatura.
Miami, una pasarela para el mundo
Aunque nos pueda sonar muy lejano, tanto en distancia como en poder adquisitivo. La piedra natural Miami marcará el paso a seguir por el diseño en todo el mundo. Al igual que sucede con las pasarelas de moda o los salones del automóvil, en la vanguardia se pueden observar diseños exagerados y excesivos que no se adaptarán ni inmediatamente ni exactamente, pero que sin embargo crean una base estética que muy pronto será interiorizada por el diseño mundial.
Se opte por uno u otro estilo, lo que sin duda ha venido para quedarse es la presencia de la piedra natural en nuestros entornos artificiales. Los materiales de calidad se imponen. Al imponerse permite que su coste se «democratice» y vaya siendo asequible cada vez para más personas.
De momento, y eso es algo que no va a cambiar al tratarse de un material de gran calidad, la piedra natural sigue siendo señal de distinción y buen gusto. Un elemento único creado gracias a cientos y miles de años de evolución geológica. Evolución que podemos disfrutar en mayor o menor medida en nuestro ambiente cotidiano.